Dame la mano y danzaremos…
(Gabriela Mistral)
El enfoque relacional: cambiando la manera de trabajar en el cuidado alternativo.
Esta práctica centrada en la relación, representa una forma de ser en el trabajo con otros, en donde existe flexibilidad, dinamismo y un espacio para co-construir un proceso de búsqueda.
(Bellefeuille y Jamieson, 2008)
¿Qué es el enfoque relacional?
Es una forma de ser, donde nos encontramos como trabajadores y cuidadores, co-construyendo espacios de conexión con los niños, niñas y adolescentes con los cuales trabajamos. Es una mirada relevante, tanto para los trabajadores en residencias, como para las familias de acogida, considerándolas, a cada una, una instancia de oportunidad para la reparación. La siguiente historia puede ayudarnos a entender qué es el enfoque relacional:
Cuando tomo un té contigo en la mañana antes de que salgas al colegio, me emociona escuchar tus miedos y alegrías. Te acompaño en reflexionar sobre lo que viene en tu día. Entiendo que estás triste porque no vino tu mamá ayer. Admiro que no te sientas enojado por eso, pero me quedo consciente de que puede haber más pensamientos y sentimientos desarrollándose en tu cabeza y tu corazón, que todavía pueden salir en cualquier momento, y posiblemente, en una manera que no será tan agradable para ninguno de los dos. Pero enfrentaremos eso si ocurre. Por ahora me quedo contigo. Aquí, ahora, escuchándote, mirándote, tomando té juntos. Disfrutando del espacio que hemos construido en este momento. Se va a acabar luego. La dinámica pronto va a cambiar, pero en este momento estamos conectados. En este momento existe la posibilidad de nuevas experiencias para ti y para mí, nuevos aprendizajes. Entiendo que con estos momentos tu cerebro puede formar diferentes conexiones, y si podemos facilitar más momentos como estos, un proceso de reparación puede comenzar. Estoy consciente de todo lo que puede significar este momento, y por eso, me quedo, contigo, hasta que te vayas.
El espacio entre-medio es aquel que co-construimos entre los niñ@s y nosotros. Es un baile que vamos acomodando hasta llegar a alcanzar confianza y en donde nos sentimos más seguros en cada actividad que compartimos. En lo subjetivo, el enfoque relacional habla de momentos de amor, en lo neurocientífico, habla de nuevas conexiones cerebrales, y en la práctica, habla de personas que pueden estar presentes, conscientes y atentas a las necesidades de los niñ@s.
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